PAÍSES BAJOS V
Ruta en bicicleta por los alrededores de Hilversum, rodeando el lago Loosdrecht:
Ruta en bicicleta por los alrededores de Hilversum, rodeando el lago Loosdrecht:
Uno
de los mayores placeres en Holanda es tener un buen día climatológico, coger
una bicicleta y salir al encuentro de lo que haya en la dirección elegida. En
nuestro caso nos dirigimos en dirección al lago Loosdrecht.
Alquilamos las bicicletas en la estación de Hilversum y salimos en
dirección a Weesp. En principio, nuestro recorrido transcurrió paralelo a la
carretera y a un gran canal en el que se alineaban pacientes pescadores
disfrutando de la tranquilidad y el buen tiempo.
En todo momento el carril bici va independiente de la carretera y llegados a un cruce, cogimos dirección Gaasperdam, a partir de aquí pequeños pueblos se sucedían sin solución de continuidad a lo largo de un gran canal. Casas con espaciosos jardines, separadas entre si por pequeños canales, en los que los nenúfares despliegan sus flores y los patos pasean sin ser molestados. Macizos de flores de todos los colores rompen la monotonía del paisaje verde.
Entre pueblo y pueblo, prados ocupados por vacas a las que los gansos hacen compañía y polder donde los juncos, los carrizos y las plantas acuáticas sirven de cobijo a las aves propias de este ambiente. En un recodo del camino una mesa de playa con vasos llenos de grosellas nos invita a dejar cincuenta céntimos y degustar la fruta que el granjero ha dejado. Después de este pequeño descanso seguimos hasta llegar a un pequeño pueblo llamado Loenen, éste al igual que Braukelen, Nieuwersluis o Tienhoven, jalonan el canal que rodea el lago Loosdrecht. Tienen una estructura muy parecida, predomina el color rojo de sus edificios y de las calles empedradas de ladrillo. Para acceder a ellos hay que cruzar el canal a través de un puente que se levanta cuando pasa una embarcación mayor. Fueron y son lugares de segunda residencia de la burguesía de Ámsterdam. Durante el siglo XVII la vida en Ámsterdam no era muy saludable, debido a la insalubridad de los canales de manera que la gente adinerada se edificó viviendas no muy lejos de la ciudad a la orilla de este lago, por lo que esta zona denota un alto nivel de vida.
En todo momento el carril bici va independiente de la carretera y llegados a un cruce, cogimos dirección Gaasperdam, a partir de aquí pequeños pueblos se sucedían sin solución de continuidad a lo largo de un gran canal. Casas con espaciosos jardines, separadas entre si por pequeños canales, en los que los nenúfares despliegan sus flores y los patos pasean sin ser molestados. Macizos de flores de todos los colores rompen la monotonía del paisaje verde.
Entre pueblo y pueblo, prados ocupados por vacas a las que los gansos hacen compañía y polder donde los juncos, los carrizos y las plantas acuáticas sirven de cobijo a las aves propias de este ambiente. En un recodo del camino una mesa de playa con vasos llenos de grosellas nos invita a dejar cincuenta céntimos y degustar la fruta que el granjero ha dejado. Después de este pequeño descanso seguimos hasta llegar a un pequeño pueblo llamado Loenen, éste al igual que Braukelen, Nieuwersluis o Tienhoven, jalonan el canal que rodea el lago Loosdrecht. Tienen una estructura muy parecida, predomina el color rojo de sus edificios y de las calles empedradas de ladrillo. Para acceder a ellos hay que cruzar el canal a través de un puente que se levanta cuando pasa una embarcación mayor. Fueron y son lugares de segunda residencia de la burguesía de Ámsterdam. Durante el siglo XVII la vida en Ámsterdam no era muy saludable, debido a la insalubridad de los canales de manera que la gente adinerada se edificó viviendas no muy lejos de la ciudad a la orilla de este lago, por lo que esta zona denota un alto nivel de vida.
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