CONJUNTO MEGALÍTICO DE ANTEQUERA

Fotos: J.A. Cortés


Entrada a la cueva de Menga


Entrada al dolmen de Viera



Peña de los Enamorados




















El Torcal, la Peña de los Enamorados y el conjunto megalítico de los dólmenes de Viera, Menga y el Romeral, lugares unidos por el recuerdo y el sentimiento espiritual de los habitantes que poblaron la Vega de Antequera hace más de tres mil años.

            El dolmen de Viera se halla escondido en un túmulo. Está formado por un conjunto de grandes piedras dispuestas en forma de corredor y una pequeña sala a la que se accede al final del pasillo. Bloques perfectamente encajados unos con otros, que pueden llegar a tener un metro de anchura. El techo de la construcción también está formado por enormes piedras planas que se ajustan  en los cantos verticales sin apenas dejar espacio entre ellas.
            La cueva de la Menga: Situada a espaldas del dolmen de Viera, se le llama cueva por estar bajo tierra. Su entrada está formada por un pequeño corredor que enseguida se abre para formar una galería ovalada. Tres menhires alineados dividen esta galería en dos. Desde el primer menhir se conecta visualmente con la garganta de la mujer durmiente que forma la Peña de los Enamorados, pues su orientación es noreste, al contrario que la mayoría de este tipo de construcciones que están orientadas hacia el este.  Desde la entrada se domina toda la vega antequerana. La magnitud de las losas que forman esta construcción no nos dejan indiferentes; la piedra que cubre la zona más profunda de la sala pesa 150 toneladas y la anchura puede llegar a ser metro y medio           Fue declarada monumento de interés en 1886, antes ya había sido utilizada como lugar para encerrar el ganado o como vivienda.
            La cueva del Romeral: En un túmulo 
rodeada de cipreses se encuentra, la cueva del Romeral. Desde su entrada se divisa la boca de la cueva de la Menga. La construcción es totalmente diferente, pues las grandes losas son sustituidas por pequeñas piedras encajadas con precisión. Tiene un largo pasillo que da acceso a una cámara circular con una cúpula que es rematada en su parte final con una gran losa de piedra. De esta sala sale un pequeño corredor que da entrada a una sala de menor tamaño, pero con la misma forma que la anterior.

Entrada a la cueva del Romeral
Corredor de entrada a la cueva del Romeral
Sala circular de la cueva del Romeral
Bóveda de la sala de la cueva del Romeral

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